¿Un libro blanco?

¡Hola de nuevo!

En esta nueva entrada vamos a hablar sobre qué es un Libro Blanco y no, no es lo que os imagináis.

Un libro blanco es un documento que el gobierno de cada país publica con el objetivo de abrir un debate, afrontar un problema y/o tomar decisiones.

En España contamos con diferentes libros blancos: Libro blanco de la educación ambiental en España, Libro blanco de atención a las personas en situación de dependencia en España o el Libro blanco de la anatomía patológica en España.

En 2015, el Ministerio de Educación encargó al filósofo José Antonio Marina la realización de un 'Libro Blanco de la profesión docente y su entorno escolar'. 

A partir de este libro se llegó a la conclusión de que era necesario llegar a un pacto educativo y así dejar atrás las diferentes reformas educativas que se dan a cada cambio de gobierno. Sin embargo, es difícil todavía dejar a un lado las diferentes ideológicas.

Actualmente existe polémico con varios temas: ¿salen bien formados los profesores no universitarios? ¿qué se debería tener en cuenta para seleccionar a los profesores? ¿deberían éstos cobrar más?

Bueno, vayamos por partes.

Para que una persona sea profesor (centrándonos en los de secundaria, bachillerato y FP) tan sólo necesita una carrera universitaria y un máster habilitante. Con ello, ya podría ejercer y, si quisiera hacerlo en la educación pública, deberá aprobar unas oposiciones. ¿Es eso suficiente? Bueno, quizá recién acabada la formación es más que suficiente pero no creo que con los años eso baste. Es necesaria una actualización del temario y del profesorado, dado que es necesario adaptarse a las nuevas tecnologías y nuevos métodos de enseñanza.

¿Qué podemos hacer para seleccionar a mejores profesores? Aunque en algunos países como Finlandia se opta porque sólo accedan aquellas personas con mejores calificaciones, creo que sería más interesante realizar test de aptitudes para ver las capacidades de cada persona sin centrarnos únicamente en el expediente académico.

Por último, una de las mayores polémicas se centran en el salario de los profesores. Podemos pensar que un mayor salario puede suponer un mayor incentivo, pero en la mayoría de los casos el problema no es tanto el salario como otros factores como las altas ratios de alumnos por aula o la falta de refuerzo y apoyo en el aprendizaje. 

Por supuesto sería interesante poder 'premiar' a aquellos docentes que mejor hagan su trabajo pero ¿qué instrumento podríamos utilizar la medirlo?

Para finalizar, me gustaría destacar dos propuestas que me han parecido interesantes y necesarias.

Por un lado, en la séptima propuesta vemos la iniciativa de añadir un programa de prácticas de 3 años, de forma que:

Cuando se realiza el máster se tiene casi 2 meses de prácticas en un centro, pero en numerosas ocasiones no es suficiente para saber si realmente es lo que esperabas. La incorporación de un programa de prácticas remunerado creo que podría ser un medio para evitar a aquellas personas sin vocación de hacer una oposición sin realmente gustarles el trabajo.

Además, al hilo de esta propuesta, veo necesaria la incorporación de una mayor inspección educativa (tal y como aparece en la duodécima propuesta). De esta forma, se impulsaría una mayor actualización tanto de la materia como del profesorado, dado que es necesaria una constante revisión para no estar obsoletos.

¿Qué opinas tú? ¿Tienes alguna propuesta interesante?

¡Os leo en comentarios!